15 de septiembre de 2025
Presupuesto: qué espacio tiene el Gobierno para ceder y qué pueden esperar las provincias

El margen fiscal es muy limitado y habrá trato diferenciado. Hasta ahora, hubo más señales de flexibilización del Tesoro que de las “mesas políticas”
Algunas consultoras notan incluso que si bien 2025 terminará con un PBI 4% mayor al de 2024, el aumento intra-año tiende a cero. El 4% es casi todo “arrastre”, que en 2026 no habrá o podría ser negativo.
Con riesgo país y tasas de interés altas la dieta fiscal aumenta. El más reciente informe mensual del Estudio Broda calculó que con una deuda pública neta consolidada de 51% del PBI y pago de intereses del 5% (esto es, un interés promedio del 10%) el superávit para hacer “sostenible” la deuda trepa a 3,5% del PBI.
El gobierno ya decidió que para las provincias no habrá ayuda generalizada, sino trato cara a cara. Muestras de lo primero fueron los vetos al proyecto de los gobernadores de “distribución automática” de los Adelantos del Tesoro Nacional (1% de la masa coparticipable total), que Catalán dijo son solo “para casos excepcionales”, al financiamiento a Universidades y a la emergencia en discapacidad. Según un informe de Idesa, el veto a la distribución automática de ATN fue un error, pues el esquema propuesto por las provincias no perjudicaba al Tesoro, cuya porción de la masa coparticipable crecía del 42,3 al 42,7%, y ponía en evidencia que para una nueva coparticipación basta con la aprobación de una ley por mayoría simple, no el acuerdo unánime de las provincias.Por de pronto, el miércoles pasado el ministro de Economía, Luis Caputo, dio muestras cuando firmó convenios de “Extinción de Obligaciones Recíproca” con Ignacio Torres, el gobernador de Chubut, por el cual se cancelaron deudas recíprocas por $100.000 millones y la provincia se comprometió a realizar cuatro obras viales en rutas “nacionales”, dos de ellas en tramos de la mítica RN 40.
No casualmente, entre viernes y sábado Lisandro Catalán, que este lunes jurará como ministro del Interior, visitó al gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo (el más amigable en la etapa inicial de gestión mileísta, pero que después de la elección bonaerense habló de “cortarle la peluca al león”) y al de Salta, Gustavo Sáenz, otro ex “dialoguista” al que LLA, hechura partidaria de Karina Milei, había hostigado en la elección salteña. Los pasos fueron en línea con los pedidos que el oficialismo escuchó de los tres primeros mandatarios provinciales que recibió tras la elección bonaerense: Alfredo Cornejo (Mendoza), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) y Leandro Zdero (Chaco).
Las otras En suma, el gobierno no tiene mucho espacio fiscal ni de política económica para ofrecer, aunque emitió señales de que pretende recuperar aliados. Las palabras, el tono y los primeros números que desgrane esta noche el presidente Milei ir cadena nacional empezarán a definir el juego económico, político y electoral de las próximas seis semanas.