PROVINCIALES
17 de noviembre de 2025
Provincia inaugura el nuevo sector de internación del Hospital Sayago

La obra, que requirió una inversión provincial de más de $ 3.248 millones para renovar integralmente el sector de internación del efector, será habilitada mañana martes. De esta manera, el Ministerio de Salud del Gobierno de la Provincia incorpora 30 habitaciones de mediana complejidad a la red de atención en el norte de la ciudad de Santa Fe, contemplando además áreas dedicadas a la atención de pacientes de salud mental.
Un nuevo capítulo a la historia del Hospital Provincial Sayago se escribirá este 18 de noviembre. Inaugurado en la década de 1960 como centro especializado en enfermedades respiratorias, el efector fue transformándose con el tiempo para responder a las necesidades sanitarias de la población del norte de la capital provincial.
La ministra de Salud de la Provincia de Santa Fe, Silvia Ciancio, destacó que “la del Sayago es una historia de adaptación y de respuesta a las necesidades de los santafesinos, y hoy esa historia se renueva con la decisión del gobernador Maximiliano Pullaro, invirtiendo de manera eficiente en infraestructura de calidad para la salud pública, con tecnología y confort para los usuarios y las familias que los acompañan durante una internación”.
En ese sentido, la ministra subrayó que el nuevo sector “rompe con la lógica de la organización en pabellones que tenían estos edificios, permite sumar camas de internación de mediana complejidad a la red de atención, equipadas y con espacios acondicionados para la atención en salud mental, como parte de un abordaje integral de la salud que promovemos como política de Estado”.
Por su parte, el ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, señaló que “se trata de una obra importante para la ciudad de Santa Fe y la región, porque sumamos servicios y rehabilitamos un área que estaba muy deteriorada”. El funcionario recordó que “al comienzo de la gestión, el gobernador nos pidió retomar los trabajos porque se encontraban con poco nivel de avance, hasta concluirlos y que este hospital mejore su capacidad operativa”.
Enrico detalló que “como parte de las obras se incorporaron baños privados en cada habitación, se reubicaron las áreas de enfermería y se mejoró la accesibilidad a la planta alta a través de la circulación norte, que a futuro posibilitará la vinculación con los demás sectores del hospital”. Además, cuenta con áreas de enfermería con box limpio y sucio, vestuarios, office y baños para el personal; habitación de guardia médica con sanitario propio y lockers de guardado; sala de médicos, departamento de enfermería, locales para terapia ocupacional, psicología, informes médicos y admisión, depósitos, locales de servicio y un área específica para instalaciones.
Infraestructura para el cuidado
Integrantes del equipo de salud valoraron la decisión que en 2024 permitió retomar los trabajos. En esa línea, la directora del Hospital, Patricia Gorostegui, destacó que “el primer objetivo de esta gestión fue reactivar la obra y llegar a este día que nos permite poner a disposición de los usuarios un espacio renovado. Son camas de internación que se integran a la red para trabajar articuladamente con los efectores de la zona, centros de salud, Mira y López y los hospitales de tercer nivel de la ciudad, especialmente el J. B. Iturraspe que es el más cercano”.
Gorostegui subrayó que “los equipos de la zona norte de la ciudad esperaban contar con estos espacios habilitados para poder trabajar en conjunto y que los pacientes puedan cumplir sus tratamientos con los cuidados que corresponden”. Y agregó: “Antes decíamos que los pacientes que venían a internarse eran héroes porque tenían que caminar 50 metros para ir al baño. Pasar ahora a una internación con baños privados es una mejora enorme en lo que denominamos hotelería en la arquitectura de los hospitales, y en infraestructura para el cuidado”.
Por su parte, el coordinador del sector, Javier Alloati, resaltó que “esta obra representa un salto de calidad en la atención. Antes teníamos una sala con muchas limitaciones funcionales y estructurales, y eso se expuso sobre todo durante la pandemia. Hoy contamos con habitaciones con todo el confort y la tecnología acorde a los estándares actuales. Los cambios significan más seguridad para el paciente y mejores condiciones de trabajo para todo el equipo de salud”.
Finalmente, la trabajadora social María José Damianovich destacó el impacto comunitario: “Este espacio renovado nos modifica a todos, tanto a los empleados como a la comunidad. La reapertura era muy esperada por los efectores de la zona y por los vecinos, por la cercanía y la posibilidad de acompañar a sus familiares internados sin tener que trasladarse a la zona sur. Regularizar las instalaciones edilicias hace que estén a la altura de la calidad humana y profesional que caracteriza la atención en este hospital”.


